¿Cómo se usa un irrigador dental?
Es muy importante usar el irrigador de forma correcta y con la presión de agua adecuada ya que si no puede llegar a ser molesto y dañar las encías.
Independientemente de si nuestro irrigador es portátil o de sobremesa, el uso es exactamente igual.
Lo primero que debemos de hacer y más si el irrigador es nuevo, es limpiarlo bien con agua, para ello echaremos agua al depósito, pondremos una boquilla y lo activaremos apuntando contra el lavabo para que el agua circule por el circuito y lo limpie de posibles impurezas.
Una vez hecho esto podremos disponernos a usarlo de la siguiente forma, es muy fácil, ya lo verás:
1Llena el depósito de agua: esta puede ser un grifo o embotellada, eso si, te recomendamos que no esté muy fría. Como consejo te recomendamos añadir un poco de colutorio, así la sensación de frescor será mayor.
2 Selecciona la presión: puede tener un botón selector o una ruleta en función del modelo. Te recomendamos empezar por el nivel más bajo e ir poco a poco aumentándolo según lo necesites. La presión debe de ser alta, pero no molesta.
3 Colocación de la boquilla: coloca la boquilla que hayas elegido en el irrigador siguiendo las instrucciones del fabricante y mételo en tu boca. Agáchate sobre la pila y es mejor que cierres un poco los labios para no salpicar.
4Enciéndelo: con la boquilla del irrigador colocada en tu boca. Sigue la línea de las encías y empieza por las muelas.
5 Sigue la línea de la encía: pasa la boquilla por todos los dientes dirigiendo el chorro por la línea de las encías y por los espacios interdentales. Inyecta el chorro durante un par de segundos en cada diente tanto en la parte externa como interna. Este proceso nos puede llevar alrededor de un minuto.
6 Vacía el depósito y limpia el irrigador: cuando hayas terminado, apaga el irrigador, quita la boquilla y vacía el agua que quede en el depósito para después limpiarlo. Si dejas agua en el depósito, podrían proliferar bacterias.
¿Cada cuánto tiempo debo utilizar el irrigador dental?¿Antes o después del cepillado?
La respuesta es que una vez al día, recomendando hacerlo por la noche y siempre después del cepillado.
Los expertos en salud bucodental recomiendan lavarse los dientes al menos dos veces al día, no es así en el caso de la irrigación dental, no es necesario.
La placa no se acumula en el mismo momento que comemos, y del mismo modo que no utilizaríamos el hilo dental tras cada cepillado, tampoco lo haríamos con el irrigador.
¿Quiénes deben usar el irrigador dental?
El irrigador dental es beneficioso para cualquier persona, pero más si cabe para las personas que acumulan mucho sarro, para los que sufren enfermedades periodontales o para aquellas personas que recurrentemente son proclives al problema de caries.
Además es altamente recomendable para aquellos que usen brackets o que tengan coronas. También los es para los niños, ¡siempre es bueno inculcar buenos hábitos!.
Video ilustrativo de uso del irrigador dental
En este video ilustrativo de la marca Waterpik se muestra de manera rápida y visual como se utiliza de manera correcta el irrigador dental. ¡Échale un vistazo!